Mientras se descalzaba para cruzar el arroyo del Lapacca, Bernadette oyó un soplo, como una ráfaga de viento, pero no vio ningún movimiento de follaje.
Fue entonces cuando la Señora se le apareció. Bernadette cae entonces en éxtasis ante la que más tarde se presentará como la Inmaculada Concepción.
Es lo que reproduce la estatua de E. Michelet, escultura de mármol blanco de 250cm, que data de 1925.
El Santuario de Nuestra Señora de Lourdes le propone en exclusiva, la réplica exacta y auténtica de este monumento, obtenida mediante digitalización en tres dimensiones de la obra original.
Esta estatua de 15.5cm hecha en Francia está hecha de resina que permite su uso tanto en interiores como en exteriores.
Será el soporte perfecto para vuestra devoción a Santa Bernardita y encontrará fácilmente un lugar en vuestro hogar.
Junto con la auténtica reproducción de la Virgen de la Gruta, le permitirá escenificar la aparición de Nuestra Señora de Lourdes en Bernadette Soubirous.